lunes, 24 de octubre de 2011

Diferencias entre los bautistas reformados y la convención bautista

Además de esto sí es posible en que cosas ustedes se diferencian de la denominación Nacional Bautista.

Respecto a la segunda pregunta, en qué se diferencian los bautistas reformados de los bautistas de la denominación o convención bautista de Colombia, creo que podemos empezar por los puntos en común: Ambos creemos que Jesús es la máxima cabeza de toda iglesia local; creemos en la autonomía de las iglesias locales, que las asambleas de miembros tienen voz y voto en la toma de decisiones de los asuntos eclesiásticos; que no debe haber jerarquía alguna entre iglesias o pastores; creemos en la separación entre la Iglesia y el Estado, en la libertad que tiene cada iglesia local para asociarse o no con otras iglesias en el desempeño de labores evangelísticas o sociales; creemos que la Biblia es la máxima autoridad y norma en materia de fe y conducta, que el bautismo por inmersión de adultos es un requisito indispensable para ser recibido en la membresía de la iglesia, que solo podemos recibir como miembros a personas regeneradas.

Y con muchas iglesias bautistas de la convención, aunque no con todas, compartimos que la salvación es solo por gracia, es decir, un don de Dios. Que fuimos escogidos por Dios para salvación desde antes de la fundación del mundo, que el ser humano no tiene la capacidad para venir a Dios por sí mismo, es decir, que no tenemos libre albedrío para tomar la decisión de creer en Cristo, sino que el pecado nos esclaviza de manera que no queremos ni podemos buscar a Dios (Romanos 3), lo cual hace necesario la regeneración, y que ésta es obrada por un acto supremo del Espíritu Santo quien, como el viento, sopla de donde quiere y va a donde quiera, lo cual indica que el va produciendo el Nuevo Nacimiento o la regeneración conforme a un designio soberano decretado desde antes de la fundación del mundo. Creemos que solo creerán en Cristo aquellos que fueron escogidos desde antes de la fundación del mundo, y esto será a través de la predicación del Evangelio, por lo tanto es deber de toda iglesia predicar todo el evangelio a toda criatura, aunque solo creerán los que sean objeto de la gracia especial de Dios, por medio de la cual les concede el don de la fe, el arrepentimiento y la regeneración. Creemos que siendo que la salvación se recibe solo por gracia, entonces esta no se pierde sino que es dada como un don irrevocable y eterno.

 Pero tenemos diferencias con algunas de las iglesias de la convención bautista colombiana, aunque no con todas, y con otras que se llaman fundamentalistas, en el tema del arminianismo. Esta es una doctrina filosófica que aboga por el libre albedrío en el hombre, es decir, que el ser humano tiene la capacidad en sí mismo de tomar la decisión de creer en Cristo o no.

Nosotros creemos, conforme a las Sagradas Escrituras, que ningún hombre puede venir a Dios como resultado de una decisión propia, pues, su condición espiritual es de muerte. Todo hombre y mujer nace espiritualmente muerto, después de la caída de Adán. (lea Romanos 3). Por lo tanto, aunque les hablemos de Cristo y le damos las mas claras razones de por qué deben creer en Cristo, ellos, por su mismo, no pueden venir a él, pues, están muertos en sus delitos y pecados. Para que puedan creer es necesario que Dios mismo, primero, les de vida espiritual, es decir, el nuevo nacimiento. Por eso Jesús le dijo a Nicodemo que nadie puede entrar al reino de Dios si primero no nace de nuevo. Es necesario nacer de nuevo, pero nosotros no producimos este nuevo nacimiento, sino que como le dice Cristo a Nicodemo, esto es producido por el Espíritu Santo, de manera soberana “cómo él quiere”. Por eso la forma de evangelizar entre un arminiano y un creyente bíblico es muy diferente. El arminiano trata de producir una decisión en el evangelizado, trata de llevarlo a que tome una decisión y haga una oración. Nosotros evangelizamos predicando la Ley y la Gracia, es decir, mostrando cuánto hemos desagradado a Dios, cuánta miseria nos cubre y entonces presentamos a Cristo, quien con su muerte en Cruz obró la redención de su pueblo. Presentamos el Evangelio e invitamos a la gente al arrepentimiento pero no tratamos de producir “conversiones”, pues esta no es nuestra función. El Espíritu Santo es quien convence de pecado, de juicio y de justicia. Nosotros sembramos, otros riegan, pero el crecimiento lo da Dios.

 Y evidentemente tenemos diferencias con algunas iglesias de la convención bautista en el tema del papel de la mujer en la iglesia (creemos que no pueden ser pastoras, predicadoras o directoras de culto), en el tema la continuidad de los dones espectaculares (creemos que aunque Dios puede hacer milagros hoy, los dones milagrosos y de revelación cesaron con la muerte de los apóstoles), en la adoración (creemos que la adoración debe estar centrada en Dios y no en el hombre), en el rol que cumplen las confesiones de fe (creemos que los bautistas tenemos un legado confesional precioso como la confesión bautista de Londres de 1689), en el gobierno de la iglesia (creemos que las iglesias locales deben ser gobernadas por un cuerpo de pastores o ancianos, no creemos que las iglesias locales deban tener solo un pastor o anciano), entre otros.

 De todas maneras, muchas iglesias de la convención o denominación bautista se identifican con los bautistas históricos (conocidos como calvinistas o reformados) en todo. De manera especial en la convención bautista del sur hay un fuerte movimiento de restauración y cientos de iglesias están regresando a las fuentes originales que caracterizaron a los que son considerados fundadores o baluartes de la fe bautista, los cuales todos fueron reformados y se identificaron con lo que nosotros creemos hoy: John Bunyan (el escritor del progreso del peregrino), Carlos Spurgeon (el príncipe de los predicadores), Arthur Pink, y los fundadores de la Convención del Sur, y los primeros presidentes de los seminarios de la convención bautista del sur.

El papel de las mujeres en las iglesias bautistas

Hola Julio que el Señor te bendiga. Tengo una inquietud, me congrego en una iglesia adscrita a la Denominación Nacional Bautista y usted es de la Iglesia Bautista Reformada; oí decir que ustedes no permiten que una mujer desempeñe función alguna en sus iglesias. Quisiera saber si esto es así y cuál es el asidero bíblico para ello. Además de esto sí es posible en que cosas ustedes se diferencian de la denominación Nacional Bautista
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Saludos fraternales.
Gracias por sus preguntas.
Respecto a la primera pregunta quiero aclarar de entrada que nuestras iglesias bautistas reformadas SI permiten, facilitan y promueven el que las mujeres desempeñen numerosas funciones dentro de la iglesia, pues, esto es conforme a las Sagradas Escrituras. En los tiempos bíblicos las mujeres desempeñaron muchas funciones y hoy también lo deben hacer. Pero como iglesias que nos esforzamos cada día por seguir las claras instrucciones que la máxima cabeza de la Iglesia, Jesús, dio a través de su revelación escrita (La Biblia), entonces damos el lugar debido y bíblico al rol de la mujer.
Es decir, las Sagradas Escrituras son muy claras respecto a los roles que el Señor asignó a los hombres y a las mujeres. A lo varones el Señor los puso como cabeza y a las mujeres les dio un rol de sujeción. Esta es una enseñanza muy clara desde Génesis hasta Apocalipsis. Ahora, no estoy diciendo que el hombre sea superior y la mujer inferior, el tema de la sujeción nada tiene que ver con superioridad o inferioridad, o, si uno tiene mayor dignidad o inteligencia que el otro. Por favor, lea la explicación que doy en mi blog http://forobiblico.blogspot.com/ sobre el tema de la sujeción bíblica.
En todas las Escrituras encontramos que a los hombres el Señor les dio la responsabilidad de ser la cabeza en el hogar, en el tabernáculo, en el templo, en la nación, en lo militar, y luego en el Nuevo Testamento a los varones el Señor les dio la responsabilidad principal en la Iglesia (apóstoles, pastores-maestros), de manera que el mismo principio es vigente siempre.
El apóstol Pablo es claro en aplicar el principio autoridad-sujeción en la iglesia y prohíbe a las mujeres ejercer autoridad sobre los varones. “Porque no permito a la mujer enseñar, ni ejercer dominio sobre el hombre…” 1 Tim. 2:12. De manera que cualquier función o rol eclesiástico en la cual las mujeres asuman un papel de liderazgo sobre los hombres debe ser evitado. Sé que vivimos en un siglo pluralista donde hablar de autoridad y sujeción, en cualquier área de la vida, suena a algo anticuado y obsoleto. Pero Dios diseñó al mundo para que funcionara bajo este principio, y, cuando se conserva la relación autoridad-sujeción, el orden es preservado, pero cuando se viola, el resultado es el caos, tal como lo estamos viendo en la sociedad de hoy: los matrimonios duran poco y los divorcios cada día se incrementan, precisamente porque nadie quiere ser cabeza y nadie quiere sujetarse. Lo mismo sucede en las iglesias de hoy. Cuando se rompe este principio de autoridad-sujeción el caos cunde.
De manera que seguimos los principios bíblicos y por lo tanto no tenemos pastoras ni predicadoras, ni directoras de culto. Creemos que la Biblia es clara en mostrarnos que estos roles de autoridad fueron dados a los varones. Incluso, los requisitos que la Biblia establece para que alguien aspire al obispado (pastor, anciano) son claros en demarcar un límite: solo para varones, maridos de una sola mujer.
Ahora, esto no significa que las mujeres no hacen nada en la iglesia. No, ellas tienen mucho campo en la vida eclesiástica: La evangelización, la enseñanza a los niños y a otras mujeres, las misiones, las obras de misericordia, la música, entre otros. Pero no las podemos poner a cumplir una función que Dios no ha autorizado para ellas. Las iglesias bíblicas de todos los tiempos han sido fieles a este principio, tanto en la patrística, en la reforma, en la época de los puritanos y hoy día.
Cuando una iglesia tiene “pastoras” claramente lo está haciendo en una contradicción contra los principios y el ejemplo de las Sagradas Escrituras. Cuando esto se da, entonces han empezado el camino del liberalismo teológico, y muy pronto entrarán otras perversiones que dañarán la fe. Como está pasando hoy día con las primeras denominaciones que empezaron a ordenar mujeres al pastorado (algunas iglesias luteranas, anglicanas, presbiterianas en USA y Europa), las cuales, violentando de manera flagrante los principios bíblicos que establecen estas funciones de autoridad para los varones, ahora no tienen problemas en seguir violando los principios bíblicos, de manera que están trabajando para ordenar homosexuales y lesbianas al ministerio, o aprobando los matrimonios entre personas del mismo sexo.

Interpretación literal y la escatología

Yo escucho a los dispensacionalistas hablar de una interpretacion Literal, Historica-Gramatical de la biblia. Es esta la misma forma de ustedes de interpretar las escrituras?

 Los reformados hemos insistido desde la época de la reforma en la interpretación histórico-gramatical de la Biblia, esto no es algo exclusivo de los dispensacionalistas, sino que viene desde mucho antes, y felicito a todos los grupos cristianos que interpretan de esta manera las Escrituras. Este principio hermenéutico histórico-gramatical, lo que significa es que la biblia debe ser interpretada conforme a las normas de interpretación de los textos, es decir, en la Biblia un verbo no es un sustantivo, sino un verbo.
Así que llegamos a la Biblia buscando su significado más obvio y directo, conforme al estilo del texto que estamos interpretando. Esto significa que no interpretamos de la misma manera un proverbio que una ley, o una poesía con una prosa didáctica (doctrina).
La prosa didáctica en la biblia es lo mas fácil de interpretar porque su sentido es el mas obvio o literal, por ejemplo, "no matarás", eso es prosa didáctica. Allí no hay que buscar ningún sentido especial, ni figuras, nada más. Pero cuando la biblia dice que "los montes aplauden", es obvio que no lo podemos interpretar como si fuera prosa didáctica, pues, los montes no aplauden. Eso es lenguaje poético, y en la Biblia el lenguaje poético se interpreta como se interpretan los poemas.
Debemos buscar el sentido de lo que quería decir el autor. Así como en español podemos decir "en esta noche preñada de encanto" - Sería absurdo que alguien pensara que el autor está queriendo decir que la noche está embarazada, pues la noche no es una cosa viva que pueda ser embarazada. La interpretación histórico-gramatical no significa que los poemas, o los proverbios, o el lenguaje figurado obvio de la Biblia se interpreta de manera literal, es decir, que cuando la Biblia habla de dragones realmente está diciendo que esos animales mitológicos existieron, sería un absurdo, y sería desconocer el estilo literario de los judíos y del mundo oriental que siempre estuvo lleno de frases figuradas o simbólicas.
En la Biblia hay pasajes que claramente son simbólicos o figurados, y esta es una de las características de los libros apocalípticos, o proféticos. Es una irresponsabilidad con el sentido original del escritor bíblico, tratar de interpretar literalmente algo que inicialmente fue dado en símbolos y figuras, es distorsión del mensaje bíblico. Ahora, el intérprete bíblico debe ser cuidadoso en tener claridad sobre el estilo literario del pasaje a interpretar.
No podemos decir que las epístolas de Pablo usan lenguaje figurado, pues, claramente es prosa didáctica, es decir, es enseñanza literal y textual. Esa es la interpretación histórico-gramatical y nosotros la defendemos con toda el alma.

 Ellos dicen que los reformados no siempre interpretan las escrituras literalmente y por eso la negacion del milenio, el no hacer diferencias entre el pueblo judio y la iglesia, y otros asuntos más. De no interpretar ustedes la biblia literalment (hasta donde sea posible por supuesto), no afecta eso tambien otros asuntos doctrinales aparte de la escatologia? 

 La Biblia debe interpretarse literalmente, es decir, de acuerdo a su literatura. Génesis es un libro histórico narrado en prosa didáctica, allí no hay fábulas, ni acertijos, así que lo interpretamos como historia. Proverbios está lleno de analogías, y muchas figuras poéticas del mundo oriental, la interpretación literal dice que debemos interpretar ese libro conforme a la literatura, es decir, no son leyes, son consejos. Los profetas del Antiguo Testamento tienen una literatura mas compleja, pues, en algunos hay historia, poesía, lenguaje figurado, no obstante cada pasaje debe ser interpretado conforme a la literatura.
Isaías dice que Dios sembró una vid que creció y en sus ramas las naciones venían a refugiarse, sería absurdo decir que algún día existió una planta que creció tanto, No, allí está hablando en lenguaje figurado refiriéndose a una nación. Eso es interpretación literal, dar el verdadero sentido y significado a la Biblia de acuerdo al estilo literario que se usa. Por cierto, los libros apocalípticos, como el Apocalipsis de Juan, usan esa clase de lenguaje en símbolos. El Dragón no se refiere a la existencia de un animal mitológico, sino que representa a Satanás, en Apocalipsis se mencionan animales de varias cabezas, es absurdo pensar que existen esos animales, mas bien debemos buscar en el resto de la Biblia que significa cada una de esas cosas.
 Ahora, interpretar de manera literal la Biblia, es decir, conforme a su literatura, nos previene de interpretar mal las doctrinas. Puesto que nosotros no sacamos doctrinas de los pasajes en lenguaje apocalíptico o figurado o poético. Las doctrinas están bien claras en los libros o pasajes escritos en prosa didáctica, como las epístolas, y los otros libros, incluso el apocalipsis, deben ser interpretado a la luz de la doctrina.

¿Qué es la carne?


Con abundante sustento bíblico, ayúdame contestando estos interrogantes, pero basados en principios bíblicos, no en conceptos humanos:

¿Qué es la carne?
¿Qué es la vieja naturaleza?
¿Qué es el viejo hombre?
¿Qué es la naturaleza pecaminosa?
¿Qué es el cuerpo de pecado?


Saludos fraternales.

 Disculpe la demora en responder, he estado un poco enredado en muchas cosas, pero ahora he podido sacar tiempo para buscar en las Sagradas Escrituras lo que ella habla sobre los temas que usted me comenta.
 Vamos a ir mirándolos uno a uno, tratando de aplicar dos sanos principios a la hora de interpretar la Biblia: El principio de que la Biblia se interpreta a si misma, y el principio de ser fieles a la gramática o las palabras que fueron usadas por los autores de las Sagradas Escrituras.
 1 ¿Qué es la carne?
En el Antiguo Testamento esta palabra se relaciona especialmente con la materia de que está compuesta el hombre, y en algunos pasajes se refiere a la totalidad del hombre. En Génesis 40:19 se usa la palabra hebrea basar y se refiere al componente principal del cuerpo humano.
En proverbios 14:30 significa todo el cuerpo, y en el Salmo 16:9 significa el hombre en su totalidad: “mi carne también reposará confiadamente”.
En el Antiguo Testamento también se usa la palabra carne para referirse a la debilidad natural del ser humano, no en el sentido moral, sino en cuanto su cuerpo es frágil.
 En el Nuevo Testamento se usan varias palabras griegas para carne. Sarx es una traducción de la palabra hebrea basar usada en el Antiguo Testamento y se refiere a la parte carnosa del cuerpo. (Apo. 19:18;) también la palabra carne significa todo el cuerpo (Gál. 4:13).
En algunos pasajes también significa el hombre completo “no tuvo sosiego nuestra carne…” (2 Cor. 7:5; Rom. 7:18).
En el Nuevo Testamento la palabra carne también puede significar que alguien es de la misma familia, por ejemplo se dice que Cristo era del linaje de David según la carne (Ro. 1:3). Pablo habla de Israel según la carne. (1 Cor. 10:18), Pablo también habla de los israelitas como sus parientes según la carne (Ro. 9:3)
 En el Nuevo Testamento también se habla de carne en el sentido de existencia física en su totalidad, sin que signifique algo malo. Por ejemplo hay referencias de ser “visto en la carne” (Col. 2:1 la Reina Valera no usa la palabra carne), también se dice que Cristo estuvo en la carne (Ef. 2:15; 1 Ped. 3:18; 1 Juan 4:2), incluso Pablo dice que la vida que vivía siendo cristiano era “en la carne” (Gál. 2:20).
 Pero, con gran fuerza, el Nuevo Testamento contrasta la carne con el espíritu. Vivir en la carne es lo contrario de vivir en el espíritu. El apóstol Pablo da una lista del fruto del espíritu, es decir, de lo que caracteriza a los que viven conforme al Espíritu, conforme al carácter de Cristo (Gál. 5:22-25). Por el contrario, quien vive conforme a la carne hace y produce lo opuesto al carácter de Cristo. (Gál. 5:19-21). Así que podemos definir la carne, en este sentido negativo, como la parte terrenal del hombre, que lo vincula estrechamente con la situación caída de la creación, que lo aleja de Dios y lo arrastra hacia lo puramente terreno, material, en lugar del servicio a Dios.
 La carne tiene sus concupiscencias y sus deseos (Ef. 2:3). Los que se concentran en los deseos concupiscentes “piensan en las cosas de la carne” (Ro. 8:5). Pero el ocuparse, en este sentido negativo, de la carne, es muerte y se constituye en enemistad contra Dios (Ro. 8:6-7). La carne, es decir, lo puramente terreno, limita la vista espiritual del hombre, y lo lleva a oponerse a Dios (Ro. 8:7) En el Nuevo Testamento a la carne se le relaciona con las pasiones y deseos puramente terrenos (Gál. 5:24). 
La carne se caracteriza por la concupiscencia y esta esclaviza los miembros del cuerpo y también domina la mente (1 Juan 2:16; Gál. 5:16; 1 Pedro 4:2; 2 Pedro 2:10; Efesios 2:3), incluso la carne llega a dominar tanto la mente que Pablo llega a hablar de “la mente de la carne” (Ro. 8:5,7). 
Colosenses 2:23 presenta a la carne como algo que llega a ser tan habitual como lo es el comer, la carne tiene apetitos insaciables, siempre quiere más, y la religiosidad o el legalismo no sirve para frenar esos apetitos. Gálatas 6:8 dice que los hombres pueden sembrar para su carne y el resultado será una cosecha abundante de corrupción carnal (Gál. 6:8). 
Los que andan conforme a la carne se caracterizan por una vida dominada de las pasiones pecaminosas (Ro. 7:5), son incapaces de obedecer la Ley de Dios (Ro. 8:3) o de agradar a Dios (Ro. 8:8). Los que andan en sus deseos carnales son hijos de ira (Ef. 2:3). 
 Esto significa que una persona regenerada NUNCA podrá ser carnal en todo el sentido de la palabra. No podemos hablar de cristianos carnales, pues, es una contradicción de términos, o es cristiano o es carnal. Los verdaderos cristianos están en la carne, pero no andan según la carne (2 Co. 10:3; Gál. 2:20). No obstante, los cristianos debemos velar porque los hechos de la carne embotan la percepción espiritual (Ro. 6:19). Somos llamados una y otra vez a no rendir nuestros miembros o nuestro ser al servicio de la carne (Ro. 8:12; Fil. 3:3; Gál. 3:3. 
EL creyente ha recibido un principio de vida que desaloja el principio de muerte que representa la carne (Ro. 8:4, 9, 13; Gál. 5:16-17; 2 Corin. 4:10, 11). El apóstol Pablo llama “carnales” a los corintios debido a su falta de madurez espiritual y sus continuos pleitos y divisiones (1 Cor. 3:1-4). 
En algunas versiones la palabra carnal se traduce como sensual. Los expertos en griego dicen que la palabra usada aquí para carnal, no se refiere a la substancia, sino a la apariencia. Los Corintios a los que se diri
ge Pablo son realmente cristianos, pues, él les llama hermanos (1 Cor. 3:1), pero se habían dejado seducir por los deseos terrenos y habían entrado en divisiones y comportamientos que los hacen ver como carnales, es decir, como incrédulos. El cristiano verdadero debe poner su mirada en las cosas de arriba y no en las de la tierra (carne), pues, las cosas de la carne tienen a atrapar y esclavizar. (Col. 3:1-3)

Siembra económica para vacaciones de un pastor

Mi inquietud es la siguiente : Asisto a una iglesia en donde uno de los copastores o pastor adjunto en dos ocasiones me ha pedido que le siembre pasajes o dinero para cuando sale de vacaciones, esto es correcto? El año pasado no me pareció mal, y le sembré pasajes y viaticos, pero este año nuevamente me preguntó que sino le iba a sembrar algo para sus vacaciones proximas, pero hay algo dentro de mi que me dice que no esta bien...que si yo le sembrara algo porque a mi me nace sin que el me lo pidiera seria diferente. O ambas cosas estan mal? Agradezco inmensamente me de su opinion si es posible con fundamentacion biblica.



Saludos fraternales.

Gracias por enviarnos tu inquietud.

El concepto de "siembra", en las Sagradas Escrituras se relaciona con varios asuntos:

- "Todo lo que el hombre sembrare, eso también segará" (Gál. 6:7). Aquí el apóstol está hablando de las acciones de los hombres. Si yo hago lo malo, entonces recibiré el mal. Si ando en mis propios caminos pecaminosos, entonces recibiré la muerte. Este pasaje se puede entender a la luz de lo que dice Pablo en el siguiente versículo: “porque el que siembra para su carne, de la carne segará corrupción; más el que siembra para el espíritu, del Espíritu segará vida eterna”.

- El apóstol Pablo, escribiendo a los Corintos les dice2 Corintios 9:6: "Pero esto digo: El que SIEMBRA escasamente, también segará escasamente; y el que SIEMBRA generosamente, generosamente también segará”. En este contexto la siembra se refiere a la ayuda económica que damos a los creyentes más pobres, a los que están pasando necesidad económica, a los creyentes que están en las cárceles, en fin, a todos los hermanos en la fe que están sufriendo muchas necesidades económicas. ¿En qué consiste la siega o la cosecha de esta siembra económica? No es tanto en esperar más bienes materiales. No. Jesús promete una bendición especial para aquellos que se acuerdan de sus hermanos más pequeños o más necesitados. En el Reino de los cielos, los hermanos dadivosos para con los necesitados, recibirán un honor especial (Mt. 25:31-40).
Por lo tanto, cuando el copastor le está pidiendo que usted le costeé sus próximas vacaciones como una siembra que luego recibirá recompensa, no está actuando conforme a las Escrituras, sino que está usando el erróneo concepto de la “siembra económica”, propuesta por modernos falsos profetas. De manera que usted debe hacer una de estas dos cosas:

- Donar al pastor el dinero para sus vacaciones, pero no verlo como una siembra, y explicarle al pastor que no puede manipular a la gente usando esos conceptos erróneos, o
- Decirle que, a mi parecer, hay necesidades más urgentes en las cuales se puede invertir el dinero: como ayudar a los creyentes más pobres, los cuales están pasando muchas necesidades.

Estoy adjuntándole una copia del estudio sobre LAS SIEMBRAS ECONÓMICAS, y un mensaje que recientemente prediqué sobre Judas 11

Su servidor en Cristo,

Julio César Benítez

¿Pueden los verdaderos creyentes llegar a ser apóstatas?


Pastor aprovecho la oportunidad para aclarar una duda que me surgio en cuanto a su excelente ensenanza en cuanto al pecado imperdonable..
Pastor Julio dice que esta carta era para Creyentes que abandonan la Fe.. Y se entra un Terreno dificil de entender para mi.. Si estos apostatas abandonan lafe UNO entonces no eran Creyentes y dos  nos enfocariamos en la discussion de que la salvacion se pierde.. Lo cual no es cierto.. Entonces :
La carta va dirigida a Creyentes ?? O a los dos
El apostate era un farsante y nunca fue del pueblo?
Gracias Pastor por su amor por la obra y perdone Ud.. Pero al contarle de su predicacion a un amigo que se fue de la Iglesia me hablo de estas preguntas.. 
Dios le guarde siempre y nuevamente gracias por su apoyo en todo 
Con profundo respeto



Respecto a su pregunta, la carta está dirigida a "los hermanos", como dice en el capítulo 3, es decir, a la iglesia, a los creyentes.
Las advertencias de esta carta, que son usadas por los arminianos para sustentar su tesis de que los verdaderos creyentes pueden perder la salvación, no tienen como fin argumentar este error, pues, todas las Sagradas Escrituras están a favor de la doctrina de la perseverancia final de los santos; incluso la misma carta contiene claras enseñanzas respaldando esta verdad.
 No obstante, como dice Arthur Pink en su comentario a Hebreos: ¿Cuáles son los medios que usa Dios para que perseveremos hasta el fin? “Estas advertencias”, responde él. Cuando el Señor advierte a los creyentes del peligro serio que corren si deciden abandonar el cristianismo bíblico para ir en pos de cualquier otra cosa, está afirmando nuestra fe. Pero a la misma vez es un mensaje para los falsos creyentes, pues, es común que dentro de los miembros de iglesias bíblicas, haya algunos que no conocen a Dios realmente, como dice Pablo. Estos serán confrontados en su fe, y al revisar y encontrar que no tienen la fe que caracteriza a los que perseveran hasta el fin, entonces el Señor usará esa advertencia para traerlos al evangelio.
 Ahora, la pregunta que algunos se pueden hacer es: Si Dios sabe que ningún verdadero creyente apostará, entonces ¿Por qué darles advertencias de algo que nunca harán? Bueno, esto es un misterio, pero es la forma que Dios usa para mantenernos despiertos. El Señor Jesús también nos dio muchas instrucciones acerca del peligro de regresar: él dijo que el que toma el arado y mira hacia atrás no es digno de él. No obstante, el autor de hebreos, al finalizar la exhortación de Hebreos 10, dice, con total seguridad: "Nosotros no somos de los que retroceden para perdición, sino de los que perseveran para salvación del alma". Esta es la seguridad del creyente, que, luego de haber examinado su fe, encuentra que efectivamente está presente, y entonces tiene la certeza de que nunca abandonará a Cristo, ni será abandonado por él.
&nbs
p;Vuestro servidor,

 Julio C. Benítez

Por qué los bautistas reformados no bautizan a los niños

Estimado pastor Julio. Un saludo especial, que el Señor le siga guiando a través de toda la obra que desempeña para la extención de la proclamación del evangelio. Hermano Julio quisiera por favor usted me orientara acerca de en que radica la diferencia entre el concepto del bautismo entre presbiterianos y bautistas reformados, puesto que no tengo casi material al respecto y veo que nuestros hermanos presbiterianos están muy seguros con el concepto del paedo bautismo , y quisiera saber como ha librado usted estas diferencias. Agradezco su colaboración.

Saludos fraternales.
El tema que mencionas en este mensaje ha sido uno de los que más discusiones ha generado en la historia de la iglesia cristiana. De manera especial este aspecto de la doctrina ha impedido la completa unión entre presbiterianos y bautistas reformados.
Las dos corrientes teológicas tienen muchos puntos en común, tal vez pudiéramos decir que son los únicos grupos cristianos que comparten prácticamente el mismo cuerpo doctrinal. La confesión de fe que usan los bautistas reformados (confesión de Londres de 1689) es una copia, modificada en ciertos artículos de la eclesiología, de la confesión de fe de Westminster (presbiteriana); de manera que ambas denominaciones han compartido la misma herencia teológica, y han mantenido cierta unidad. Los autores presbiterianos como R. C. Sproul, Luis Berkhof, Charles Hodges, son muy leidos por los bautistas reformados; de la misma manera, autores bautistas reformados como Carlos Spurgeon, Arthur Pink, Jhon Bunyan son leídos por los presbiterianos. A pesar de esta unidad en casi el 99% de la doctrina profesada, persiste una diferencia insalvable, la cual está relacionada con el tema del bautismo.
Los presbiterianos dicen que el bautismo es una continuación en el nuevo pacto del sacramento de la circuncisión del antiguo pacto, y así como los padres judíos tenían la obligación de aplicar el sacramento de la circuncisión en sus hijos a una edad tierna, también los padres creyentes deben aplicar el sacramento del bautismo a sus pequeños hijos, como una señal de que ellos nacieron bajo la bendición del pacto.
Los bautistas, por el contrario, decimos que los niños no pueden ser bautizados, sino solamente los creyentes. Ahora, ¿Porqué los bautistas reformados no hacemos como el resto de reformados en el mundo, respecto al bautismo de niños? Los bautistas reformados, así como los presbiterianos, creemos que hay un solo pacto de gracia, el cual viene desde antes de la fundación del mundo y cobija a todos los períodos de la iglesia desde su inicio en Edén. Este pacto de gracia se ha manifestado a través de diferentes pactos, en especial del Antiguo y el Nuevo Pacto. Entre los dos hay continuidad, pero también hay transición.
El Antiguo Pacto, en su forma externa, incluía a todos los descendendientes de Abraham, a través de Isaac, y Jacob, el padre de Israel. Todos los niños que nacían en Israel eran considerados miembros del pueblo del pacto, por lo tanto debían recibir la señal del mismo, el cual era la circuncisión (realmente la circuncisión solo se aplicaba a los niños varones, en esto vemos una transición muiy significaba en el nuevo pacto, donde el bautismo debe ser aplicado a todos los que nacen de nuevo, tanto mujeres como varones). Esto no garantizaba que todos eran salvos, pues, solo los que eran de la fe eran verdaderos hijos de Abraham. No obstante, siendo la circuncisión una señal externa que identificaba a los miembros del pueblo de Dios (un pueblo nacional con límites geográficos, y relacionado con una etnia, aunque en ocasiones se recibieron extranjeros), entonces se aplicaba sobre todos los varones.
Ahora, cuando pasamos al Nuevo Pacto hay una importante transición. Ahora el pueblo de Dios no estaría limitado a un sitio geográfico, ni a una etnia en particular. La iglesia estaría en todas partes, en medio de este mundo hostíl. El autor de la carta a los Hebreos nos deja ver que las ceremonias del Antiguo Pacto, las cuales estaban revestidas de muchos elementos externos, eran sombras temporales de una realidad espiritual y eterna que vendría con Cristo. Una de esas realidades eternas y espirituales que vinieron con el Mesías, fue que el pueblo de Dios ahora no estaría marcado tanto por una identidad externa (aunque si tiene muchas manifestasciones externas) sino por una nueva realidad interna. El pueblo de Dios estará en medio del mundo y será conocido por Dios mismo, el pueblo tiene un sello espiritual y es de índole espiritual. Siendo que ahora este pueblo está marcado por un distintivo netamente espiritual, entonces a él no se entra sino solamente a través de un nacimiento espiritual. Esto no significa que en el Antiguo Pacto se entraba realmente al pueblo de los salvos por medio del nacimiento físico, pero la señal debía aplicarse sobre todos, salvos y no salvos, lo único que se requería es que naciera de una familia hebrea. Siendo que la iglesia en el Nuevo Testamento no tiene un distintivo nacional con límites geográficos, ni de raza o etnia, y siendo que a ella se entra a través de un nacimiento espiritual, entonces, la señal del pacto debe aplicarse a los que nazcan espiritualmente en la familia de Dios. Si bien es cierto que solo Dios sabe quién nació de nuevo, no obstante hay unas señales externas que pueden indicarnos que una persona nació de nuevo. Es decir, una profesión creíble de fe en Cristo puede ser un indicativo de que dicha persona ha nacido de nuevo, por lo tanto, todo aquel que haga esta profesión de fe y esté dispuesto a obedecer los mandatos del evangelio debe ser bautizado. Esto es lo que practicaba la iglesia apostólica.
De manera que el mismo principio que regía en el Antiguo Pacto sigue en el Nuevo, es decir, todos los niños deben ser bautizados, pero ahora no se trata de niños en su elemento físico, sino de niños en Cristo. Todos los que van naciendo de nuevo son bebés en Cristo, y ellos deben recibir la señal del pacto, es decir, el bautismo.
 Los padres creyentes aunque no pueden bautizar a sus niños porque en ellos aún no podemos ver una profesión de fe creíble en Cristo, tienen la responsabilidad de guiarlos en la fe, de criarlos en la amonestación y disciplina del Señor, de educarlos en los principios de la fe cristiana, enseñarles las Sagradas Escrituras, orar con y por ellos, unirlos a las actividades de la iglesia local e involucrarnos en la misma.
Los padres creyentes confiamos en que el Señor, en su Gracia electiva, haya escogido a nuestros hijos para salvación y por eso los educamos en la fe. En el Nuevo Testamento no encontramos ninguna enseñanza respecto al bautismo de infantes, ni por ejemplo ni por precepto.
Los hermanos presbiterianos suelen usar el silencio de las Escrituras o inferencias llevadas al extremo para concluir que en el Nuevo Testamento si se menciona el bautismo de niños, usando aquellas ocasiones en las cuales en el libro de los Hechos se nos dice que algunas personas se bautizaron junto con sus familias o sus casas. Ellos presuponen que en esas casas debía haber niños pequeños, los cuales, en consecuencia, fueron bautizados. Pero es muy peligroso armar doctrinas basadas en el silencio de la Biblia o en inferencias tan extremas. Toda vez, cuando en el mismo Nuevo Testamento encontramos el principio para saber a quiénes se debía bautizar: “El que creyere y fuere bautizado…” (Mr. 16:16). La secuencia es: primero creer y luego ser bautizado. “Así que, los que recibieron su palabra fueron bautizados…” Hch. 2:41), recibir la palabra significa: creer de corazón en el evangelio, este es el requisito inicial que la iglesia apostólica debía ver en el candidato para luego ser bautizado.