Saludos fraternales.
Gracias por sus preguntas.
Respecto a la primera pregunta quiero aclarar de entrada
que nuestras iglesias bautistas reformadas SI permiten, facilitan y promueven
el que las mujeres desempeñen numerosas funciones dentro de la iglesia, pues, esto
es conforme a las Sagradas Escrituras. En los tiempos bíblicos las mujeres
desempeñaron muchas funciones y hoy también lo deben hacer. Pero como iglesias
que nos esforzamos cada día por seguir las claras instrucciones que la máxima
cabeza de la Iglesia, Jesús, dio a través de su revelación escrita (La Biblia),
entonces damos el lugar debido y bíblico al rol de la mujer.
Es decir, las Sagradas Escrituras son muy claras respecto
a los roles que el Señor asignó a los hombres y a las mujeres. A lo varones el
Señor los puso como cabeza y a las mujeres les dio un rol de sujeción. Esta es
una enseñanza muy clara desde Génesis hasta Apocalipsis. Ahora, no estoy
diciendo que el hombre sea superior y la mujer inferior, el tema de la sujeción
nada tiene que ver con superioridad o inferioridad, o, si uno tiene mayor
dignidad o inteligencia que el otro. Por favor, lea la explicación que doy en
mi blog http://forobiblico.blogspot.com/ sobre el tema de la sujeción
bíblica.
En todas las Escrituras encontramos que a los hombres el
Señor les dio la responsabilidad de ser la cabeza en el hogar, en el
tabernáculo, en el templo, en la nación, en lo militar, y luego en el Nuevo
Testamento a los varones el Señor les dio la responsabilidad principal en la
Iglesia (apóstoles, pastores-maestros), de manera que el mismo principio es
vigente siempre.
El apóstol Pablo es claro en aplicar el principio
autoridad-sujeción en la iglesia y prohíbe a las mujeres ejercer autoridad
sobre los varones. “Porque no permito a
la mujer enseñar, ni ejercer dominio sobre el hombre…” 1 Tim. 2:12. De
manera que cualquier función o rol eclesiástico en la cual las mujeres asuman
un papel de liderazgo sobre los hombres debe ser evitado. Sé que vivimos en un
siglo pluralista donde hablar de autoridad y sujeción, en cualquier área de la
vida, suena a algo anticuado y obsoleto. Pero Dios diseñó al mundo para que
funcionara bajo este principio, y, cuando se conserva la relación
autoridad-sujeción, el orden es preservado, pero cuando se viola, el resultado
es el caos, tal como lo estamos viendo en la sociedad de hoy: los matrimonios
duran poco y los divorcios cada día se incrementan, precisamente porque nadie
quiere ser cabeza y nadie quiere sujetarse. Lo mismo sucede en las iglesias de
hoy. Cuando se rompe este principio de autoridad-sujeción el caos cunde.
De manera que seguimos los principios bíblicos y por lo
tanto no tenemos pastoras ni predicadoras, ni directoras de culto. Creemos que
la Biblia es clara en mostrarnos que estos roles de autoridad fueron dados a
los varones. Incluso, los requisitos que la Biblia establece para que alguien
aspire al obispado (pastor, anciano) son claros en demarcar un límite: solo
para varones, maridos de una sola mujer.
Ahora, esto no significa que las mujeres no hacen nada en
la iglesia. No, ellas tienen mucho campo en la vida eclesiástica: La
evangelización, la enseñanza a los niños y a otras mujeres, las misiones, las
obras de misericordia, la música, entre otros. Pero no las podemos poner a
cumplir una función que Dios no ha autorizado para ellas. Las iglesias bíblicas
de todos los tiempos han sido fieles a este principio, tanto en la patrística,
en la reforma, en la época de los puritanos y hoy día.
Cuando una iglesia tiene “pastoras” claramente lo está
haciendo en una contradicción contra los principios y el ejemplo de las
Sagradas Escrituras. Cuando esto se da, entonces han empezado el camino del
liberalismo teológico, y muy pronto entrarán otras perversiones que dañarán la fe.
Como está pasando hoy día con las primeras denominaciones que empezaron a
ordenar mujeres al pastorado (algunas iglesias luteranas, anglicanas,
presbiterianas en USA y Europa), las cuales, violentando de manera flagrante
los principios bíblicos que establecen estas funciones de autoridad para los
varones, ahora no tienen problemas en seguir violando los principios bíblicos,
de manera que están trabajando para ordenar homosexuales y lesbianas al
ministerio, o aprobando los matrimonios entre personas del mismo sexo.
6 comentarios:
Walter, dice: Eso es lo que dice la biblia. No es algo de moda, ni algo popular, y tiene sabor antiguo, pero es la Palabra de Dios. No es correcto quitar el ministerio a las mujeres, ni quitarles dones espirituales, ya que las mujeres tiene todos los dones espirituales que los hombres, pero tampoco es correcto caer en la exageración de hacerlas pastoras, obispos y, maestras de hombres mayores de 12 años de edad. Para Dios no hay varón y mujer, en el servicio, pero si hay ordenen en el servicio. Y ese orden es que al varón le está dada la autoridad del orden. Los hombres debemos agradar a las mujeres, pero no permitirles que juzguen ni procuren reconvenir ni predicar a hombres creyentes mayores de 12 años. Las mujeres pueden predicar a hombres inconversos, pero sólo a ellos.
¿La mujer solo puede estar detras del Pastor? ¿la mujer solo puede estar de pie al lado de los discipulos de Cristo? ¿la mujer es solo una figurita en las Iglesias o denominaciones? si notas una buena discipula de Cristo,¿que se merece una buena discipula de Cristo? Seria bueno contestar estas preguntas, pero dejando de lado el machismo, solo asi sabremos que DIOS no hace acepción de personas ni de sexo, asi que seamos mas objetivos y dejemos atras a las discipulasde Cristo, y sepamos reconocer lo que DIOS hace en ellas.
Pertenezco a una Iglesia Pentecostal y siempre me he creido que al permitir a la mujer enseñar o tener autoridad en la Iglesia se esta obviando una instruccion directa del orden q Dios estableció. Me alegra saber q no estoy sola en mi apreciacion
El pentecostalismo da un libertad sin límites a la mujer. Lamento informarles que la Biblia no lo hace. No es un asunto de quién es mejor, sino un asunto de orden, de diseño y quien lo a ordenado todo y diseñado todo es Dios. Que seamos más obedientes a su Palabra y no a los extraños sueños, visiones o profecías que están dañando tanto a las iglesias. Dios les bendiga.
Yo estoy de total acuerdo. El lugar de la mujer es en su casa cuidando de su esposo y sus hijos. La palabra de Dios es muy clara en los roles que desempeña tanto la mujer como el hombre. Y el que no asepte esta en desobediencia de la palabra de Dios. El diseño la familia y El sabe porque ordeno las cosas asi. Yo leo y obedesco a mi Dios. Por eso el mundo y las familias estan echadas a perder y por eso ay tanto divorsio y tanto hijo desobediente porque nos reusamos a obedecer y cada quien tiene su propia opinion y asta quieren correjir la palabra del Dios perfecto El CREADOR DEL UNIVERSO como si tuvieran mas sabiduria que El mismo Dios. No ay que escojer solo lo que nos gusta y conviene de la palabra de Dios.
La Palabra de Dios es clara y simple. Está escrito de tal manera que no admite objeciones, a menos que nos creamos más inteligentes que Dios para burlarnos de su palabra, o creamos que Dios es machista, a pesar que el mismo aclara que no hace acepción de personas.
Cuando Pablo escribe en 1 Timoteo 2:12 "NO PERMITO A LA MUJER ENSEÑAR NI EJERCER DOMINIO SOBRE EL HOMBRE" y en 1 Corintios 14:34 y 35 dice "VUESTRAS MUJERES CALLEN EN LAS CONGREGACIONES... PORQUE ES INDECOROSO QUE HABLEN EN LAS CONGREGACIONES" tenemos que tener en mente que también dijo dos cosas que los porfiados de siempre se niegan a reconocer:
1. Esto es para "TODAS LAS IGLESIAS DE LOS SANTOS" (ver 1 Cor. 4:17; 7:17)
2. Sí alguno se cree profeta, o espiritual, "RECONOZCA QUE LO QUE OS ESCRIBO SON MANDAMIENTOS DEL SEÑOR" (ver 1 Tim 3:15)
Solamente en las iglesias que no están formadas por los santos se pueden aceptar estas cosas. Pero en la iglesia de Cristo, formada por los santos que han creído en Él y le han aceptado como su Señor, la mujer no debe tener preeminencia sobre el hombre.
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